Glauber Rocha
Glauber Rocha, nacido el 14 de marzo de 1939 en Vitória da Conquista, Bahía, Brasil, fue un destacado cineasta, guionista y crítico de cine, conocido por su contribución al movimiento del Cinema Novo en Brasil. Rocha creció en una familia de clase trabajadora y desde joven demostró un gran interés por el cine y la política.
A una edad temprana, Rocha comenzó a involucrarse en el mundo del cine, trabajando como crítico de cine y escribiendo para varias publicaciones. Su pasión por el cine lo llevó a estudiar en la Escuela de Cine del Museo de Arte Moderno de Río de Janeiro, donde se sumergió en el mundo del cine y comenzó a desarrollar su propio estilo distintivo.
En la década de 1960, Rocha emergió como una figura central en el movimiento del Cinema Novo, un movimiento cinematográfico brasileño que buscaba retratar la realidad social y política del país a través del cine. Sus primeras películas, como "Barravento" (1962) y "Deus e o Diabo na Terra do Sol" (1964), reflejaban su compromiso con el realismo social y su deseo de explorar las profundidades de la condición humana.
"Deus e o Diabo na Terra do Sol" (Dios y el diablo en la tierra del sol), considerada una de las obras maestras del cine brasileño, sigue la historia de un campesino llamado Manuel y su esposa Rosa, quienes se rebelan contra la opresión y la explotación en el noreste de Brasil. La película, que combina elementos de folclore brasileño con una crítica social feroz, estableció a Rocha como uno de los cineastas más importantes de su generación.
En 1967, Rocha dirigió otra película influyente, "Terra em Transe" (Tierra en trance), que examinaba las complejidades políticas y sociales de Brasil a través de la historia de un poeta y político idealista. La película, que fue aclamada por la crítica internacional, ganó el Premio Especial del Jurado en el Festival de Cine de Cannes y solidificó la reputación de Rocha como un cineasta audaz y visionario.
A lo largo de su carrera, Rocha continuó desafiando las convenciones cinematográficas y explorando nuevas formas de narrativa y estética. Sus películas posteriores, como "Câncer" (1972) y "A idade da terra" (1980), reflejaban su compromiso con la experimentación y su deseo de ampliar los límites del cine brasileño.
Además de su trabajo como director, Rocha también fue un prolífico escritor y activista político, que abogaba por el cambio social y la justicia en Brasil y en todo el mundo. Su influencia en el cine brasileño y su legado como uno de los pioneros del cine latinoamericano perduran hasta el día de hoy, y sus películas continúan siendo estudiadas y admiradas por cinéfilos y académicos de todo el mundo. Glauber Rocha falleció el 22 de agosto de 1981 en Río de Janeiro, Brasil, a la edad de 42 años, dejando un legado perdurable en el mundo del cine.